VIVIENDA DOMÓTICA
Hoy es posible que personas con discapacidad, movilidad reducida o diversidad funcional, puedan disponer de todos los elementos de su hogar de una forma cómoda y con mayor calidad de vida en su día a día, gracias a la domótica. Muchos conocen está tecnología como la que es capaz de conseguir “viviendas inteligentes”. De esta forma, tan sólo con movimiento o pulsando un botón podemos tener acceso y activar diversos mandos de aparatos de nuestro hogar. Por ejemplo, subir y bajar las persianas, encender la televisión o regular la luz de nuestro comedor.
En personas con problemas degenerativos el hogar inteligente les brinda la opción de poder ir usando sus opciones de forma progresiva, a medida que vayan perdiendo su movilidad o autonomía, y de esta forma, su vida podrá seguir de forma autónoma con estos apoyos.
Una persona con movilidad reducida o con otras discapacidades puede encender sus aparatos electrónicos bien por voz, bien por mandos a distancia, o pueden realizar llamadas de emergencia o activar sus servicios de alarma si lo necesitan. En casos de movilidad reducida severa incluso hay aparatos habilitados para levantarse de la cama, acceder a la ducha, mandos para abrir puertas, etc.
¿Para qué sirve la domótica?
1. SEGURIDAD
Un hogar más seguro, esto es lo que proporciona principalmente la instalación domótica. Sistemas de televigilancia, telecontrol, teleasistencia. Es decir, el residente podrá saber al instante si alguien intenta entrar en su casa, si tiene escapes de cualquier tipo, o recibir apoyo médico o asistencial en caso de necesitarlo. Las alarmas pueden conectarse de forma que avisen de la forma que a la persona en cuestión le sea más cómodo (avisos sonoros, visuales, etc.).
2. AHORRO
Ahorro en varias vertientes: de energía, de tiempo y de dinero. Igual hay que invertir al principio para instalar el sistema, pero a la larga el usuario comprueba que sus recibos de electricidad, agua, etc. bajan, y con ello recupera el capital invertido. Incluso esta la posibilidad de ir computando el consumo realizado.
3. MEJOR CALIDAD DE VIDA
Sobre todo por el mejor acceso a los sistemas de comunicación y por el apoyo recibido para realizar tareas cotidianas, que sin estos sistemas, podrían costar gran esfuerzo por parte de una persona con discapacidad, o que incluso serían imposibles de realizar. Asimismo, se une una mayor comodidad para vivir y un punto de confort en el hogar.
4. PERSONALIZACIÓN
El sistema domótico se ajustará a las características del inquilino del hogar, cambiando según los requisitos o necesidades del usuario, y dándole unas utilidades u otras. Esto es posible gracias a su flexibilidad, el sistema está compuesto por módulos, por lo que si se precisan nuevos usos se puede ampliar.
5. FÁCIL Y SENCILLO
Tanto su instalación como su uso destacan por su sencillez. El sistema X-10 no precisa obras, sino que utiliza la red eléctrica para realizar las conexiones necesarias para las diversas funciones (seguridad, gestión de energía, comunicaciones, etc.). Asimismo, su programación se realiza desde el ordenador y se va seleccionando cada categoría desde un teclado o mando.
→ Las personas con discapacidad o personas mayores con problemas de movilidad dan la bienvenida a la vivienda domótica, ya que les ayuda en una gran parte de sus tareas cotidianas.
¿Quieres seguir leyendo artículos de este estilo?
Por favor, valora nuestro post.
¡Queremos saber tus impresiones!
